Este 8 de marzo las mujeres que laboran en los centros de salud conmemoran su día alzando su voz en contra de los abusos, los atropellos y las malas condiciones de trabajo.
De acuerdo con los datos recopilados por Monitor Salud a través de una encuesta en la que participaron 537 mujeres trabajadoras de 84 centros de salud, 53,4% dijo sentirse explotada laboralmente.
Siendo los hospitales más afectados:
✓El Hospital Clínico Universitario de Caracas – Distrito Capital.
✓El Hospital Arnoldo Gabaldón – Bolívar.
✓Hospital Ruiz y Páez – Bolívar.
✓Hospital de Lídice – Distrito Capital.
✓Hospital Dr. Pastor Oropeza (Materno Infantil de Caricuao) – Distrito Capital.
✓Hospital Miguel Pérez Carreño – Distrito Capital.
✓Hospital José Manuel de los Ríos – Distrito Capital.
✓Maternidad Concepción Palacios – Distrito Capital.
Por su parte, 29,2% de las encuestadas dijo haber sufrido amenazas, agresiones físicas, coacción para renunciar y detenciones arbitrarias durante el último año.
Estos datos que recogen la información de trabajadoras en 20 estados y el Distrito Capital son una muestra de las terribles condiciones en las que se encuentran los centros de salud, lo cual afecta a las mujeres, que han sido las más golpeadas por la crisis humanitaria, social y económica que se vive en el país.
“Me dicen que, si no me gusta la crisis del hospital que me vaya”, “nos amenazan con la ley del odio por protestar”, “me cambiaron la modalidad de pago”, estas son algunas de los terribles abusos a los que se somete al personal sanitarios.
Sin embargo, los casos más comunes son:
•Las constantes imposiciones en el cambio de guardia del personal, sin importar si laboran en otros lugares.
•El exceso de trabajo, y es que las mujeres deben cubrir de dos a tres servicios por la escasez de personal, es así como quienes laboran en el turno nocturno ni siquiera pueden dormir la mayoría de veces.
•El cambio en la modalidad de pago es otra de las medidas de agresión, aquí se incluye la suspensión del salario.
•Amenazas al exigir equipos de protección adecuados para ejercer su labor.
•Son coaccionadas a renunciar si no les gustan las condiciones de trabajo.
•Amenazan a quienes se atrevan a realizar protestas, asambleas o cualquier actividad pacífica para defender sus derechos.
Aún ante estos escenarios las mujeres de la salud RESISTEN a las persecuciones, amedrentamientos y amenazas, TRABAJAN bajo las peores condiciones para sacar adelante un sistema sanitario en ruinas, LUCHAN por alcanzar reivindicaciones laborales, por el respeto a sus derechos, por recuperar el valor de la familia.
Es así como desde Monitor Salud seguiremos denunciando estas situaciones en pro de restablecer la dignidad como valor en cada centro sanitario.
